El Climaterio, un cambio vital

¿Sabes que posteriormente a la adolescencia vivimos otro proceso que también representa los mismos cambios, pero en la etapa adulta, y que también puede tener mucho impacto en nuestras vidas?

Este proceso nos pone en contacto con nuestros cuerpos y requiere que prestemos atención a nuestro autocuidado personal, mental y social. Os voy a hablar del climaterio y el proceso conocido como menopausia.

¿Que es el Climaterio?

Es una etapa que se produce en la mujer entre los 45 y los 55 años aproximadamente, y que se inicia con la retirada de la capacidad fértil causada por una bajada del nivel de estrógenos, que son las hormonas sexuales femeninas y que además producen cambios en el metabolismo de las grasas, la salud ósea y las articulaciones.

Todos estos cambios físicos y hormonales producen un importante impacto en la salud física de la mujer, que además viene acompañado por cambios a nivel psicológico y en consecuencia sociales y de relación.

Podríamos decir que el Climaterio es una condición hormonal, que tiene un elevado impacto en la condición física y puede producir importantes consecuencias psicológicas, porque además puede venir acompañado por otros procesos psicológicos normativos como el síndrome del nido vacío o la dependencia de los progenitores, que supone también un impacto a nivel identitario.

Pero vamos por partes…

Cambios en la condición física

La bajada de los estrógenos en la mujer produce consecuencias que se viven como un declive de la condición física: la pérdida de la masa ósea, aparición de los sofocos, dolores articulares, y cambios en la sexualidad, que, si no se han prevenido y se tiene una aceptable condición física, tienen un impacto importante en el día a día.

La aparición del dolor físico y la sensación de vulnerabilidad supone un impacto importante en la mujer durante esta etapa.

Afectación en la gestión emocional

Además, igual que en el período de la adolescencia, los cambios hormonales y los síntomas físicos, suponen una afectación emocional importante que nos afecta como mujeres y evidentemente en la relación que mantenemos con nuestro entorno: estamos más irascible, pueden aparecer períodos de tristeza y perdida del deseo sexual, cambios en el aspecto físico y ausencia de conducta hedonista.

El factor cultural actual, también es indispensable para entender este proceso de climaterio y menopausia: ¿Os habéis fijado en los anuncios o en la imagen de la mujer en nuestra sociedad? ¿Cómo se vive una mujer con dolores físicos, con arrugas, aumento de peso? Creéis que esta aceptada socialmente, o tiene la sensación que tiene que luchar consigo misma para conseguir que no se vean las canas, no aumente de quilos o que no se noten las arrugas de la cara?

Pues a menudo ahí estamos, con la sensación que nuestro cuerpo ha cogido autonomía doliendo partes que desconocíamos y asándonos de calor a lo más mínimo e intentando no coger quilos de más y disimulando la aparición de las arrugas. En definitiva: luchando contra nosotras mismas con los últimos avances antienvejecimiento.

Y os prometo que esta no es la actitud para conseguir más bienestar.

Todo depende de la actitud

Primero de todo: envejecer afortunadamente podremos hacerlo. ¡Significa madurar y cumplir años y yo, prefiero cumplirlos a dejar de hacerlo!

Estos cambios, igual que la adolescencia, son físicos. Son inevitables y forman parte de la madurez humana. Ahora bien, como más hayamos tomado consciencia en nuestras vidas de la salud física y el autocuidado y la responsabilidad de todos mis pensamientos, mi cuerpo, mi alimentación, mis conductas, mis emociones, etc. Mejor podremos llevarlos y con menores consecuencias.

Desde el Método CREATE, la conciencia y la responsabilidad personal son dos ejes básicos de nuestro bienestar, y con el climaterio tendremos de nuevo un cambio y una oportunidad para poder aprenderlos. Porque si algo nos permite el climaterio, es un gran contacto con nuestro cuerpo. Los síntomas físicos son muy evidentes, no podemos ignorarlos y además afectaran nuestro día a día. Y por tanto se convierten en una oportunidad, si no lo hemos hecho ya, de empezar a cuidarnos y a mirarnos.

Cuidarnos y mimarnos ¿Cómo?

Pues si no lo hemos hecho anteriormente, el Climaterio, nos sitúa en la mirada hacia nosotras mismas. Los síntomas físicos son una prioridad a la que tendremos que poner atención y empezar a atender, para iniciar opciones de autocuidado: cuidar nuestra alimentación, el ejercicio físico, así como atendernos aquí y ahora en nuestras necesidades se convertirán en una prioridad para conseguir mayor bienestar.

Aceptar nuestra nueva condición física, dejar de cuidar a los demás para atendernos y regularnos a nosotras será indispensable para afrontar esta etapa en nuestras vidas.

Este proceso, además como te decía anteriormente puede coincidir con otros cambios psicológicos normativos importantes como son el síndrome del nido vacío o el inicio de la dependencia de los padres, que supondrán a la vez cambios sistémicos que también afectarán en nuestro proceso.

Aceptar la autonomía de los hijos o el inicio del cuidado y la dependencia de los padres se sumarán a este proceso de cambio y tendremos que afrontar y gestionar estas nuevas realidades en nuestras vidas.

¿Habéis comprobado como la vida es cambio? Pero tranquilas, cada cambio es una oportunidad para aprender a vivir de forma diferente para conseguir mayor bienestar y sentido vital: poner mayor consciencia, asumir la responsabilidad en nuestras vidas, gestionar nuestra emocionalidad, tomar acción y darle un sentido, aspecto que aprendemos con el Método CREATE.

¿Necesitas que alguien te acompañe en tu proceso de cambio?

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